Seguramente muchas veces te has preguntado esto; y es que las buenas ideas emprendedoras muchas veces toman tiempo en formarse y nacer y otras más bien pareciera que es cuestión de oportunidad o invitación del mercado.
Para enfocar el tema me gustaría citar a Steven Johnson, en su obra: ¿de dónde provienen las buenas ideas?, quien nos invita a ubicar un momento en la historia que fue propicio para el desarrollo de ideas geniales; y analizar qué pasaba en esos países donde surgieron estas ideas que configuraron el mundo posterior; que pasaba cuando emerge la revolución científica ligada a la revolución industrial; y concluye diciendo: que este suceso se concentra en Inglaterra y el elemento central fue la decadencia del bar o pub inglés, en donde se reunían las personas; y la emergencia del Café, que sustituía la opción del bar, donde tomando café se estimulaban conversaciones que no se habrían producido en el bar, tomando cerveza o wiski. Entonces el factor determinante de la revolución industrial científica y cultural, señala Johnson, fue la emergencia del café como lugar de encuentro, como un lugar donde puedo plantear mis pensamientos, mis corazonadas y complementarlas con las del otro en una conversación que se genera teniendo en cuenta el café como punto de reunión y lugar en donde surgen las buenas ideas.
Y aquí surge la pregunta ¿Cuáles serían los espacios, las competencias y habilidades generadoras de emprendimiento?, ¿Cuáles serían los caldos de cultivo en donde debe situarse una persona para que surjan ideas emprendedoras y se convierta en un emprendedor?, ¿Cuáles son esas condiciones, sistémicas, emocionales, etc., que tenemos que introducir para que se produzcan espacios expansivos de creatividad e innovación en donde podamos crear intervenciones virtuosas, generativas y transformadoras?
Pues yo creo que podemos empezar por lo que nos dice Steven Johnson, en su obra: ¿de dónde provienen las buenas ideas?; rescatando que los seres humanos nos nutrimos unos a otros y vivimos en comunidad, siendo los puntos de encuentro, como el Café, lugares en donde las personas acudimos libremente y en donde por ejemplo se da el espacio así como las condiciones para la conversación y a través de ella poder explorar, la creatividad, ideas, sueños, inquietudes, aportes y porque no también muchos cambios al quehacer o rutina de oferta de productos y/o servicios que tenemos en nuestras comunidades.
Me despido, haciéndote un pedido, me gustaría que me cuentes como surgieron las ideas emprendedoras en tu experiencia; ¿cómo fue que te convertiste en emprendedor? Y si aún no eres un emprendedor, pero tienes la idea de emprender, cuéntame si recuerdas desde cuándo tienes esta idea allí dando vueltas y que crees que te hace falta para que florezca.
TIPS: GENERA ESPACIOS DE CONVERSACION
Las ideas emprendedoras surgen de espacios de conversación; entonces te sugiero que procures reunirte periódicamente con tu equipo en un lugar favorable a todos y donde se sientan a gusto; si son muchos integrantes pueden hacer reuniones por áreas.
Propicia reuniones frecuentemente, con amigos que ya tengan mucho más tiempo en el camino del emprendimiento.
Busca un mentor que te oriente y quiera compartir contigo sus experiencias.
Deja atrás el individualismo y el espíritu de llanero solitario que de allí NO surgen las BUENAS ideas emprendedoras.
¡Hasta la próxima querido lector!
Si tuvieras alguna duda o comentario, te pido que me lo hagas llegar al correo: lminano@glf.com.pe o de lo contrario lo podemos conversar personalmente, de manera gratuita, todos los martes de 10.00 am a 3.00 pm en:
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Para lo cual te pido que coordines una cita llamando al Teléfono 349-3183.